Nadal, que hoy participó en un acto promocional junto a la presidenta de Banesto, Ana Patricia Botín, al ser la imagen de la entidad bancaria, añadió que la próxima semana jugará en París y después en Shangai y que espera "tener fuerzas en este final de temporada".
Respecto a la derrota ante el argentino David Nalbandian, en el Masters Series de Madrid, Nadal aseguró que "perder siempre sienta mal, muy mal", aunque se consoló afirmando que le queda "mucho por mejorar y mucho trabajo por delante para conseguirlo".
"Federer es un grandísimo jugador y el actual número uno del mundo, pero no me obsesionó con él, ni con alcanzar la cima de la clasificación. Mi rival no es Federer, con el que sólo me puedo enfrentar en las finales, sino el jugador que tengo enfrente en cada partido", explicó.
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